El Diputado Carlos Enrique Avendaño Nagaya integrante del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional presentó ante el pleno de la LXIV Legislatura del Congreso del Estado un Código de Ética Parlamentaria, el cualtiene por finalidad establecer normas sobre la conducta que los Diputados del Congreso del Estado de Chiapas, que deben observar en el desempeño de su cargo.
El legislador panista dijo que éste código pretende garantizar la imagen que el Congreso debe tener ante el Estado, así como asegurar la transparencia en la administración de los fondos que le son confiados. Dijo también que el Código en comento previene faltas contra la ética y establece los mecanismos de investigación y sanción a los legisladores que contravengan la ética parlamentaria, y se valgan de sus cargos para enriquecerse o cometer actos de corrupción.
Durante su intervención parlamentaria y en la exposición de motivos, el Diputado Carlos Avendaño dijo tajante: “Sin justicia no hay libertad, y la base de la justicia no puede ser otra que el equilibrio entre los derechos de los demás, con los nuestros”. Por lo que dijo, esto se pueden traducir en la manifestación clara y trasparente de la tarea de la ética de nuestro tiempo: “La preocupación del hombre por el respeto y el reconocimiento a la dignidad de los otros”. Puntualizó.
En este mismo tenor el Legislador sostuvo que el Código de Ética del Congreso del Estado, tiene como finalidad constituirse en una espiga de tan profundos pensamientos, que traiga la reflexión, que motive la conciencia y que por supuesto se lleven a la práctica, los principios, reglas y virtudes inherentes a la función legislativa, que constituyen esencialmente el sentir de nuestra sociedad.
Finalmente el Diputado Carlos Avendaño solicitó que su propuesta sea turnada a la Comisión de Reglamentación Y Prácticas Parlamentarias para el analisis correspondiente y reiteró: “Este Código aspira al reconocimiento de que la ética sea la senda por la que las y los Diputados transiten cotidianamente; que se constituya en un documento no sólo informativo sino formativo, a tal punto que su práctica reiterada se convierta en la segunda naturaleza de los miembros del Congreso, para que, a través de su vida, dé contenido, claridad y sistematización a tales postulados”.
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